El sueño de Agosto se cumplió una vez mas, con María Santísima de protagonista, socorro del rocianero, nuevamente la patrona de Rociana se echo a sus calles para bendecir al que le reza, le pide, la mira…su gente se agolpaban en su calle para verla cruzar el dintel de su antigua ermita. A las 21:30 a los sones del himno nacional salía a procesionar entre un mar de devotos, la salida como siempre complicada por la estrechez de la calle pero una vez superado este obstáculo con sones macarenos comenzó a andar el paso de la señora portado como no podía ser de otra manera por sus hijos rocianeros. Por la callejilla llego a la calle hinojos y a la plaza de la Hacienda abarrotada de gente, pero quizás la novedad de este año fue la gran petalada que se le realizo desde un balcón de la calle Amparo, con mas de dos mil seiscientos claveles de diversos colores.
Por mi pueblo llegan olores a nardos, se va acernado la Virgen con el niño entre sus brazos, el la calle candao situaron un arco en la esquina con la calle Santa Inés, cuando la patrona de rociana estaba debajo se lanzo un castillo de fuegos artificiales preparado por los vecinos. Silenciosa la procesión por la calle Santa Inés, en recuerdo de una persona muy vinculada con la hermandad, por ella unos de los candelabros del paso lucia crespón negro. La marcha Madre hiniesta rompió en la esquina de la calle García Lorca donde se lanzo una nueva petalada, poco a poco la Reina de Rociana se fue acercando a la plaza que lleva su nombre en recuerdo de la fundación del Convento, allí un rotulo lo recuerda con la siguiente inscripción: “ En diciembre de 1589 el presbítero Pedro Martín Calvo decide a sus costas fundar una capellania que pone bajo la protección de Santa María del Socorro, sirva esta plaza como ofrenda de un pueblo para conmemorar aquella fecha y toda la esperanza derramada en cuatrocientos años de devoción”. Muy bien engalanada esta zona con unos preciosos arcos de papel y techos de flores.
Camina una gran señora sobre unos hombros valientes luciendo una gran corona que es regalo de su gente, la procesión bajo la calle colon para seguir por la avenida de villarrasa donde se encuentra la Ermita de San Sebastian sede actual de la cruz de la calle la Fuente, esta hermandad esperaba a la virgen en la puerta con su estandarte corporativo y varas, por la amplitud de la avenida en su ultimo tramo le daba a la procesión mucha vistosidad. Ya por la calle Andalucía y Sevilla la virgen apuraba los últimos metros que la separaban de su destino, la Iglesia del santo con la que comparte el patronazgo de esta mariana Villa de Rociana, a su llegada los fuegos artificiales la despedían de sus calles hasta el día 8 de Septiembre, fiesta grande de María. Una vez dentro en un último esfuerzo de los rocianeros la subieron al altar mayor parroquial. Una vez más Rociana supo lucir a la que es luz y guía de sus vidas, María Santísima del Socorro Coronada.
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